Rocío Flores ha vuelto a sentarse en un plató de televisión después de casi tres años en silencio. Su presencia ayer en ¡De Viernes! marcó un momento de gran expectación, pues eligió este escenario para enfrentarse a cuestiones íntimas y familiares que todavía siguen generando debate.
Con evidente nerviosismo y entre gestos de contención, Rocío se sinceró sobre su madre, Rocío Carrasco. "Me dio un ataque de ansiedad", confesó al recordar cómo reaccionó cuando se enteró de que su madre había intentado quitarse la vida. Una frase que estremeció tanto a los colaboradores como a los espectadores, devolviendo a primera línea una historia de heridas abiertas.
